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LA FORMULA MÁGICA

Foto del escritor: Juancarlos GonzalezJuancarlos Gonzalez

Tenemos el Que y el Porqué, pero nos hace falta el Cómo y Cuándo. ¿Tú ya los tienes?


Crecemos con la idea y esperanza que al llegar de adulto seremos alguien, el famoso cuando sea grande, y dejamos los puntos suspensivos para imaginar que seremos o en que nos convertiremos, lo malo es que solo lo pensamos o soñamos y no ponemos nada en práctica, no porque queramos si no porque alrededor de nosotros asesinos furtivos se han dedicado a cumplir su rol de eliminar dichos sueños.


Algunas veces somos nosotros que nos boicoteamos el querer cumplir el sueño, porque no hay manual que nos diga esa respuesta que muchos la buscamos como el tesoro perdido, me refiero al cómo, llegar al éxito, tener dinero, ser famoso, lograr el sueño que anhelamos, buscamos por la ciencia, que nos dicen los astros si este mes será el nuestro, en nuestras manos si las líneas que tenemos nos dirigen a un buen futuro a pesar de que en el presente sigue igual que el pasado.


Será que un cigarro de naturaleza fresca y verde nos ayudara a que nuestro cerebro cree la línea directa con el astral y nos guíe a cómo llegar a tener eso que nos hace tanta falta. El famoso como y cuando será nuestro yugo en esta vida, si lo vemos en números es tan corta y rápida que lo podríamos medir con un metro, el problema es que no sabemos cuántos metros se estirara de cada uno.


No corras buscando respuestas con gurús, estarán igual de perdidos que tú, no esperes tanto que el cielo te mande algún rayo de luz porque muchos siguen esperando aun en el cementerio. Nos han vendido que el tener más es mejor y menos estarás mal, nos la hemos comido entera y sin rezongar, cuando fue la última vez que dormiste sin tener el celular en la mano viendo que más puedes comprar, cual bolsa que nunca se llena; la última vez que levantaste la mirada para ver que hermosa la madrugada sin necesidad de ver que es lo que tiene nuevo el vecino.


No tienes argumento para colocar excusas del porque seguimos queriendo más y más, porque se nos hace tonto el tener poco, si al morir no tendremos Uber para llevar nuestros bienes.


El perseguir el cómo y cuándo es como la zanahoria que nos ponen enfrente para correr a una meta que es invisible, sin percatarnos de lo hermosa que es la pista donde estamos corriendo, cual galgos si nos herimos o lastimamos nuestro cuerpo no nos queda más que ser sacrificados. No dejes que te ponga esa soga al cuello ni mucho menos el palo que sostenga la zanahoria, no estarás matando tu cuerpo únicamente, te llevaras de colada a tu espíritu combativo.


No es que a la primera lograras ver esta pista, ni mucho menos lograremos obtener la fórmula mágica. ¿No hay respuesta exacta, acaso PI tiene fin?


Donde colocamos la intriga, la ansiedad, el stress y las penurias que crean el tener menos, donde escondemos la humildad, los valores y la honestidad al momento de tener mucho, pues balance no existe en esta ecuación.


A pesar de que tenemos la respuesta del cómo y cuándo tan clara, casi que es invisible e imperceptible a nuestro mirar, aprender a disfrutar lo que se nos da y luchar por nuestros anhelos o sueños, pero si convertirlos en una obligación y mucho menos dar cabida a la frustración porque no logramos nuestro objetivo es el fin.


Eres el o la protagonista de esta historia, el guion puede estar escrito, pero existe la improvisación entonces que estas esperando para cambiar la formula en cada que y porque solo bórralo de la pizarra por un dibujo que muestre una cara feliz.


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